Frases que no me gusta oir

Sólo un pequeño ejemplo de algunas frases que no me gusta oir en el trabajo, y que escucho con demasiada frecuencia, cuando un adulto me pide una recomendación de algún libro, y yo le muestro alguno que creo que encaja con lo que busca:





¡¡NO, esto lo va a destrozar, es un destrozón!! :

Si, puede que las patas del pollo Pepe duren poco, pero si le cuenta el cuento, lo más probable es que el niño se quede atento e interesado. Pruebe. Los niños más pequeños deben manipular los libros. Y es muy raro que lo destroze, créame que he visto a muchos niños muy pequeños abrir este libro; a lo mejor se sorprende. Si rechaza el libro, que no sea por esa razón.






¡¡No, es muy pequeño para la poesía, tiene dos años!!

Son cuentos rimados de animales. Dos años es una edad ideal. La edad tiene que ser orientativa. A los dos años tiene la atención suficiente y además lo más probable es que le gusten los animales. Pruebe. Si usted lo rechaza, que no sea por esa razón.





¡¡No, todavía no sabe leer!!

A los niños hay que contarles cuentos aún antes de que empiezen a hablar. ¡¡no esperemos a que sepan leer!!. Los cuentos son para ser contados y compartidos, sobre todo cuando son pequeños. Pruebe. Esta historia es entretenidísima y los dibujos son geniales. Si lo rechaza, por favor, que no sea por esa razón.






¡¡No, tiene mucha letra!!

Si le ofrezco este libro, probablemente es porque busca un relato de aventuras, o de piratas, para un niño mayor de diez años. Por favor, ¿tiene tiempo? Siéntese, lea la primera página, la segunda. Si rechaza el libro, por favor, que no sea porque le parece que tiene mucha letra.





¡¡No, es un niño, no una niña!!

A lo mejor el niño tiene otras preferencias más marcadas, y prefiere las motos y los coches, o los libros de Pocoyo. Pero si le ofrezco este libro es porque usted me pidió cuentos clásicos. ¿es un condicionante que salga Caperucita en la portada? ¿si en la portada hubiese un dibujo de El Gato con Botas, o de El soldadito de plomo, sí que lo aceptaría? Si lo rechaza, por favor, que no sea por esa razón. (Esta frase la tengo que escuchar DEMASIADAS VECES)






¡¡No, es una niña, no un niño!!


Usted busca libros de coches, para niñas. Hay pocos libros de medios de transporte con princesas y hadas. Si hubiese, que sería genial, serían todo un éxito. No pasa nada, la niña esta interesada y a ella no le importará que el libro no sea rosa, si le gustan los medios de transporte. Créame. Si lo rechaza, que no sea porque no "parece" de niña.





¡¡No, se va a aburrir!!


Puede, puede que se aburra, no lo sabemos. Pruebe. Traiga al niño, siéntese, léale el cuento. Si es un regalo y le parece la historia poco atractiva, pídame otro libro, dígamelo. O simplemente diga "No se, quizás, a lo mejor se puede aburrir". Dude. Pero no asevere, no afirme. Porque si su duda la transforma en afirmación suena a pre-juicio. Y puede parecer un matiz muy pequeño, pero los prejuicios denotan una actitud.
Dígame: no me gusta, me parece feo, no es lo que busco, no es lo que tengo en mente, es muy caro, es muy grande, pesa mucho y lo tengo que mandar por correo....hay mil razones válidas para rechazar un libro. A mi me gustan sólo la mitad de los libros que veo. Pero cuidado con los prejuicios y los niños.

El lenguaje construye la realidad.




No sigo aunque podría seguir :P. Gracias por leer esta entrada "desahogo".
Estoy a punto de salir de vacaciones y creo que se nota!!! jajaja

Gracias de nuevo por leer, es un gusto poder compartir esto :D

¡¡Buenísimas noches!!